El mundo del plástico es extraordinario; por ello, si has leído el título de esta publicación te estarás preguntando qué es lo que tienen en común el plástico y el billar. Pues para resolver este misterio tenemos que introducir un nuevo elemento a la ecuación: el marfil. Sí, las bolas de billar eran fabricadas en la antigüedad con el marfil de los colmillos de los elefantes, este hecho hizo que la población de elefantas se empezara a diezmar.

Para buscar una solución al problema, los productores de billar quisieron premiar con 10.000$, lo que equivaldría en la actualidad a unos 3.000.000$, a quien inventara algo para sustituir a las bolas de marfil. Fue entonces cuando John Hyatt en 1872 patentó la primera máquina de moldeo por inyección.

Aunque no ganó los 10.000$, sí podemos decir que este hecho fue el principal impulso histórico hacia el mundo del plástico, ya que actualmente se sigue utilizando ese sistema que consiste en calentar el plástico y verterlo en un molde metálico hasta que se enfríe.